21 julio, 2013

LOS VERBOS DE LA FE (3+1. Lc 10,38-42)


 
En la vida de la fe conjugamos todos los verbos indistintamente; sin embargo, todos no tienen la misma importancia. Un ejemplo claro nos lo da el evangelio de hoy.

1. Marta se multiplicaba. El verbo que emplea san Lucas para describir la actitud de Marta es poco frecuente. En la traducción unos insisten en que ‘se preocupaba’; otros en que ‘andaba agobiada’; otros dicen que ‘estaba absorbida’; otros que ‘afanada’. Todos indican inquietud, prisa, nerviosismo… Marta no está a gusto, sino que por el contrario se siente incómoda, convencida de que todo depende de ella, de su trabajo, de su buen hacer.
 


2. María escuchaba su palabra. El verbo que emplea san Lucas para describir la actitud de María es ‘escuchar’. Es uno de los verbos más importantes en la fe bíblica, tanto judía como cristiana. La oración de los judíos, que a la vez es una confesión de fe, comienza precisamente con estas palabras: ‘Escucha, Israel’. Jesús habla en su evangelio de que el hombre ‘que escucha su palabra y la cumple’ es una persona sabia. Escuchar supone también un aprendizaje.

3. Voluntarismo vs gracia. En el fondo hay una cuestión que lleva inscrita el ser humano en su alma desde el día en que nace. ¿Cómo relacionarnos con Dios? ¿Desde el voluntarismo que hace que dependa todo de nosotros, o de la escucha abierta y confiada, dejando que sea la palabra de Dios la que nos transforme? Difícil e importante postura, que dura toda la vida.

3+1. El aprendizaje de cada día. En nuestra vida religiosa unos somos más voluntaristas, otros por el contrario queremos vivir con un espíritu abierto al don inesperado y sorprendente de Dios.  Marta y María podrían ser dos formas de vivir la fe. Jesús se inclina por aquella que ‘escucha la palabra’ y se deja transformar por ella.

 

Pedro Ignacio Fraile Yécora

Domingo 21 de Julio de 2013